Shane MacGowan cumple hoy 64 años con salud renqueante pero con ilusión en nuevos proyectos. El desdentado ex líder de los Pogues anunció hace unos días su primer libro de arte, “The Eternal Buzz And The Crock Of Gold”.
| | Escucha Billie Eillish en Amazon Music Unlimited (ad) | |
Programado para su lanzamiento en abril, el libro de arte estará limitado a solo 1000 copias.
“The Eternal Buzz…” presentará bocetos, pinturas, autorretratos y estudios de personajes divertidos junto con letras escritas a mano, historias, fotografías y fragmentos abstractos que se remontan a la infancia de MacGowan y a través de seis décadas de jolgorio punk e irlandés.
Además, contará con fotografías que capturan momentos sinceros entre el cantante y sus compañeros de banda en la gira, fotografías personales en casa y salidas nocturnas con celebridades como Nick Cave, Bob Dylan, Pete Doherty, Kate Moss, Bryan Adams y Daniel Day-Lewis.
El libro, “un trabajo de amor” para MacGowan, lo ha comisariado su esposa y colaboradora Victoria Mary Clarke, editado por Paul Trainer e incluye un prólogo de Johnny Depp y el crítico de arte Waldemar Januszczak.
“Siempre me gustó el dibujo y la pintura, y solía hacer todo tipo de cosas, lanzadores, hombres del IRA, punks adolescentes merodeando en los cafés, lo que sea…”, ha dicho MacGowan en un comunicado.
“Cuando tenía unos 11 o 12 años me dediqué a estudiar historia del arte y a mirar pinturas antiguas y modernas, sabía mucho sobre arte. Es uno de los únicos O Levels que obtuve, el de arte”.
“Hice la portada del álbum de The Pope ‘Crock of Gold’ y diseñé la portada del primer álbum de Pogues, ‘Red Roses For Me’. Y más o menos diseñé el segundo álbum ‘If I Should Fall From Grace With God'”.
Shane continúa:
“En términos de los materiales que utilizo, me gustan los pasteles, pero realmente no pienso en eso. Pintaré o dibujaré sobre cualquier cosa, con cualquier cosa. Me gustan más o menos todos, desde Fra Angelico y Giotto hasta lo último, como Caravaggio fue el último del Renacimiento, antes de entrar en el Expresionismo”.
“Amo a Cezanne, Gauguin, Monet, Manet. Amo a los impresionistas irlandeses, Lavery, Jack B Yeats, Brendan Fitzpatrick. Los impresionistas del siglo XX que pintaron la época de Irlanda luchando por su libertad. Me gustan Max Ernst, los surrealistas, Dali, Chagall… Dios, hay millones”.
Victoria Mary Clarke añade: “Cuando estábamos haciendo el documental “The Crock of Gold”, Julien Temple quería algunos de los dibujos de Shane, así que le pedí a mi madre que echara un vistazo y viera si tenía alguno. Me envió una bolsa de basura llena de dibujos y letras que le había pedido que cuidara hace 25 años, ni siquiera sabíamos que existía, fue milagroso, ¡como encontrar una vasija de oro!”.
“Su arte trae muchos recuerdos muy divertidos y, a menudo, horribles de diferentes etapas de nuestra vida juntos. Muchos de sus dibujos se han hecho en mis listas de la compra y mis propios diarios, y en cosas como bolsas de enfermos y blocs de notas de hotel, maletines de avión, hojas de estudio de grabación y diarios, por lo que es fácil saber exactamente cuándo se hicieron”.
“Me encanta la forma en que los dibujos, las notas y los fragmentos de historias brindan una idea de las canciones de Shane, es como entrar en su estudio y ver todo lo que estaba sucediendo en su mente. Las ilustraciones son como un tapiz visual del funcionamiento interno de su proceso creativo. Me siento muy privilegiado y muy emocionado de poder compartirlos con el mundo en un libro, especialmente para las personas que aman las canciones ”.
Johnny Depp, que colecciona el arte de MacGowan, escribe en un prólogo de The Eternal Buzz…”:
“Es raro que un genio creativo como Shane tenga una sola vía de producción. Es probable que un talento tan incendiario tenga una multitud de facilidades mediante las cuales su talento pueda infiltrarse en la atmósfera y cambiar el clima tal como lo conocemos”.
“Y así, revelada aquí, es la propensión de Shane por lo salvaje, por lo absurdo, por lo político, por lo bello, todo encauzado y enhebrado a través de la aguja de su bolígrafo. Pero, esta vez, no a través de la herramienta del lenguaje. En cambio, la agudeza visual de Shane tomará la iniciativa aquí. Sus visiones hablarán por sí solas”.
“A veces invocarán asombro, a veces pueden parecer decididamente amenazantes, pero, independientemente del medio, su obra siempre estará llena de poesía, un poco como el gran hombre y mi gran amigo, él mismo; el artista, Shane MacGowan”.