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En la noche del 8 al 9 de diciembre de 1980, John Lennon fue abatido dentro del portal de Dakota House por cuatro disparos de bala de Mark David Chapman. Se cumplen 34 años del trágico suceso, y Paul McCartney ha rememorado el asesinato de su compañero en los Beatles y ha descrito al asesino como “idiota entre idiotas”.
Dos tiros en la espalda y dos en un hombro le causaron a Lennon el suficiente destrozo para ser víctima de una hipovolemia (perdió más del 80% de su volumen sanguíneo), al menos una de las balas perforó su vena aorta. John llegó sin pulso ni respiración al Hospital Roosvelt, donde fue declarado clínicamente muerto tras 20 minutos de intentos infructuosos por recuperar su circulación sanguínea.
Lennon, de 40 años, había firmado esa misma tarde una copia del álbum de su regreso, “Double Fantasy”, a su ejecutor. Lo increíble es que ni José Sanjenís Perdomo, portero de la casa, ni el conserje Jay Hastings, advirtiesen – o no diesen importancia- la presencia de Chapman bajo el arco del portal a las 10:50 de la noche, hora aproximada en la que se produjo el crimen.
Paul McCartney ha recordado este fin de semana el triste acontecimiento en una entrevista concedida a Jonathan Ross de ITV:
“Hubo acritud en Los Beatles. Pero cuando le mataron éramos amigos que nos solíamos llamar el uno al otro e intercambiar recetas de pan…”
Y así ha recordado el momento exacto en que supo la noticia:
“Estaba en casa cuando recibí una llamada de teléfono. Era de madrugada, yo estaba en el campo, recibí la llamada y fue como… (se echa para atrás en el sillón en que estaba sentado). Creo que fue así para todo el mundo”.
“Fue simplemente horroroso. No se podía aceptar y yo no podía aceptarlo. Durante días no podía imaginarme que se había ido… Fue un shock enorme”.
Con respecto al asesino de su amigo, esto es lo que pensó Paul de él:
“Una frase se repetía en mi cabeza: ‘El idiota de todos los idiotas’. Me decía: ‘Este es sólo un tarado, este tipo no está ni siquiera motivado políticamente, sólo una cosa del azar’. Para mí lo más triste era saber que no le iba a volver a ver más, que no íbamos a pasar ya más ratos juntos”.