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Nuevos documentos policiales han descubierto que se encontraron numerosas píldoras en la residencia de Prince en el momento de su muerte, y una declaración jurada establece que uno de sus médicos prescribió oxicodona al difunto artista oculto bajo el nombre de un amigo.
Prince murió a los 57 años a causa de una sobredosis accidental de fentanilo el 21 de abril de 2016.
A principios de este mes, se reveló que los investigadores que examinaban las circunstancias que rodeaban la sobredosis del artista no habían podido establecer quién le había proporcionado la dosis fatal de fentanilo.
Ayer, se desvelaron una serie de documentos de la policía y la corte con conclusiones de las búsquedas policiales iniciales.
Varias píldoras fueron encontradas en numerosos contenedores dentro de la residencia de Prince, Paisley Park durante una búsqueda inicial en la casa, pastillas de oxicodona en particular prescritas a nombre de Kirk Johnson, un amigo personal cercano del músico.
Se cree que fueron prescritas para Johnson para proteger la privacidad de Prince, pero hay que tener en cuenta que la oxicodona no fue enumerada como una de las causas de la muerte del artista.
Sin embargo, los documentos no revelan cual fue la fuente de donde provenía el fentanilo que mató a Prince, aunque sí que las autoridades también consultaron sus cuentas de correo electrónico y los registros telefónicos de los asociados a Prince, como es el caso de Johnson, para intentar determinar dónde obtuvo la dosis letal. Los documentos no revelan el resultado de las búsquedas por e-mail.