Durante las protestas de Black Lives Matter 2020, Paul McCartney recordó la época en que los Beatles se negaban a tocar ante audiencias segregadas.
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Beatles: recomendaciones
Los Beatles al principio era una banda de rhythm and blues básicamente y, como es lógico, tenían mucho que agradecer a los negros y su música.
“En 1964, los Beatles debían tocar Jacksonville en los Estados Unidos, y descubrimos que iba a ser una audiencia segregada. Nos supo mal. Dijimos: ‘¡No nos gusta eso!’ Y el concierto que hicimos fue para la primera audiencia no segregada. Luego nos aseguramos de que esto estuviera en nuestro contrato. A nosotros nos pareció de sentido común”.
Starr retuiteó el mensaje de McCartney y añadió el suyo propio:
“Como dijo mi hermano Paul, los Beatles siempre defendieron la igualdad de derechos y justicia, y desde entonces nunca he dejado de trabajar por la paz y el amor. Os envío mi paz, mi amor y mi apoyo continuo a todos los que marchan y defienden la justicia y un mundo mejor”.
As my brother Paul said The Beatles always stood for equal rights&justice and I’ve never stopped working for peace&love ever since. #blacklivesmatter,#peaceispossible-I send my peace love&continuous support to everyone marching & speaking up for justice & a better world ?✌️?❤️ pic.twitter.com/YNznLJGeV4
— #RingoStarr (@ringostarrmusic) June 6, 2020
Los Beatles tocaron en Florida una sola vez. Y estaban dispuestos a cancelar la fecha del 11 de septiembre de 1964 en el Gator Bowl de Jacksonville cuando supieron que la audiencia debía ser segregada racialmente.
Esa política desafiaba a la Ley de Derechos Civiles promulgada por el presidente Lyndon Johnson dos meses antes, en julio, que prohibía la segregación en lugares públicos.
Para el grupo, la idea de separar a negros y blancos era anatema, y los cuatro exigieron que los asistentes negros se sentaran junto a los blancos. Hicieron una declaración cinco días antes del espectáculo que decía: “No vamos a aparecer a menos que se permita a los negros sentarse en cualquier lugar”.
John Lennon dijo en aquel momento:
“Nunca actuamos antes audiencias segregadas, y no vamos a comenzar ahora. Preferiría perder nuestro dinero”.
Los promotores se derrumbaron.
Más tarde, en 1966, McCartney explicaba;
“No teníamos prejuicios. Siempre estábamos interesados en audiencias de raza mixta. Siendo una actitud compartida por todo el grupo, nunca quisimos tocar en Sudáfrica ni en ningún lugar donde los negros estuvieran separados. Solo pensábamos: ‘¿Por qué deberías separar a los negros de los blancos? Eso es estúpido, ¿no?”.
Una historia que apareció en el documental de 2016 de Ron Howard, “The Beatles: Eight Days a Week – The Touring Years”.
Según el periodista radiofónico Larry Kane, que acompañó a la banda en su gira de verano de 1964 por Estados Unidos:
“Todos ellos fueron muy enfáticos sobre Jacksonville. Dijeron que si va a haber segregación de cualquier tipo, no iban. Fue sorprendente que los cuatro, hombres jóvenes que vieron el mundo, comenzaran a actuar y reaccionar sobre este tema muy, muy candente y sensible, sabiendo que realmente irritaría a muchos estadounidenses”.
A partir de entonces, los Beatles exigieron audiencias integradas por adelantado. En 2011 fue vendido en subasta un contrato de su show de 1965 en el Cow Palace de San Francisco. Una cláusula decía sucintamente: “No se requerirá que los artistas actúen ante una audiencia segregada”. Se vendió por 23,000 dólares, muy por encima del precio esperado entre 3,000 y 5,000 dólares.
McCartney apostilló cuando se presentó el filme Eight Days a Week:
“Éramos unos tíos bastante inteligentes. Viendo la escena política y, viniendo de Liverpool, tocábamos con bandas negras y con personas negras en la audiencia. No nos importaba”.