James Murphy no es precisamente mi músico favorito. Pero estoy totalmente de acuerdo con él cuando asegura que la actual música dance, de la que viven cientos de disc-jockeys que no tienen ni idea de música, le produce asco, desesperación. Como si fuera algo repelente.
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El productor de Arcade Fire asegura que es como un ruido que le hace vomitar. No le produce ningún síntoma de tristeza ni de alegría ni desesperación. El sentimiento es de asco, de algo que le pone nervioso.
Es la misma impresión que me produce a mí. Exactamente, incluyendo esos bastardos musicales como David Guetta, que es odioso, un puñetero negociante de discotecas, o Calvin Harris o, por no hablar de Tiesto o Trasto. Todos los ellos “pepitos piscinas” que atentan con el buen sentido de la música.
James Murphy, además, considera que salvo unos pocos, hay millones y millones de discos que se ponen o se bailan y que nadie sabe quienes son sus autores. Además, sin ninguna referencia armónica, porque en ese caso ya empezarían los problemas para esos bastardos musicales. Al no saber nada ni de música ni siquiera de ritmo.
2 comentarios
A mi el que mas asco me da es Avicii y su ultimo disco destinado para el publico americano..¡¡ese chunda- chunda country!!, se nota a leguas que esta confeccionado para triunfar en las listas U.S.A
Pero lo peor es ese video de Hey brother haciendoles la pelota ,ya me dirás tu a mi que interés puede tener Avicii por los estadounidenses caídos en guerra (el mismo que yo, vamos)…aparte, pienso que este dj esta totalmente manipulado y que el solo es participe de su disco en un 10% (o menos)..el resto me da a mi que esta hecho por los mejores productores suecos (que son muy listos y expertos en “one hits wonders”). La verdad es que tragamos con todo lo que nos meten las discográficas por las narices.
Lo que mas me sorprende es que con la mierda de musica dance que hay es ahora cuando mas venerada esta la figura del dj
Absolutamente de acuerdo con todo. Estos tipos han convertido la música de baile, algo de por si necesario y que puede ser genial, en algo nauseabundo.