Tal día como hoy, hace 45 años la maravillosa Josephine Baker, la primera mujer negra en protagonizar una película importante ( Zouzou , 1934), moría a los 68 años de una hemorragia cerebral en París
La tragedia acosaba a Josephine Baker cuando en 1964 pierde su castillo donde vivía con la “Rainbow Tribe” . Arruinada, se queda en la puñetera calle.
Es su amiga Grace de Mónaco quien acude al rescate y le deja alojarse gratis en su apartamento de Roquebrune , cerca de Mónaco.
Incluso diez años después, en pleno “revival” de la gran Josephine Baker , la princesa Grace, su marido Raniero y Jackie ´O Onassis le pagan su último espectáculo, la verdadera cortina final para celebrar sus 50 años en el “show-bussiness” .
Josephine tenía 68 años y aún podía bailar a su estilo de “mono mareado” y cantaba mejor que nunca. El 8 de abril de 1975 , cuando se produce la “premiere” en el teatro Bobino , entre las butacas están admirándola Sophia Loren, Mick Jagger, Shirley Bassey , Diana Ross y Liza Minelli.
No pudo dar el quinto concierto. En la noche del cuarto , murió tranquilamente en su cama, víctima de una hemorragia cerebral.
El disco de “Josephine a Bobino 1975” existe, pero es muy difícil de encontrar. Sólo apareció en vinilo . Pero lo más increíble de esta historia musical de la primera estrella del pop es que una de la últimas canciones que cantara en su cuarta aparición del Bovino fuera una versión increíble del tema de Bob Dylan , “The times they are changing” (“Los tiempos están cambiando”), como ella bien sabia como imponente progresista.